Lo que nunca podré decirte...

Es triste, muy muy triste cómo terminó, tal vez debí ser más dura y terminar por la paz, que ese era mi plan esa noche del 1 de enero, pero el corazón me ganó intentado arreglar lo irreparable...

Desde un principio, a mediados del segundo año de la universidad, te dije que no sería fácil, porque sentía que era muy complicada, te conté mis experiencias anteriores, pese a eso y todas las señales negativas continuamos, porque nos sentíamos uno, un solo corazón. Tal vez el destino lo quiso así, tal vez solo estábamos de paso en la vida del otro, para dejar una gran huella y una gran lección. Si buscas culpable, quizás toda la culpa la tenga yo, o quizás no... eso depende del punto de vista de cada uno.

Es triste sí, demasiado triste, pero a la vez no tanto (quién te entiende Lau), porque tus motivos no son ciertos, tal vez para ti la infidelidad es cualquier palabra, no lo sé, pero no fue todo aquello que dijiste, aquello que creíste, eso que te quede bien en claro!

Mi personalidad es así, desde que te conocí así soy, a lo mejor nuestro error fue no darnos el tiempo para conocernos como amigos, aunque no te negaré que desde el principio te di un trato especial, porque lo eres, siempre lo has sido, porque así lo sentí; Tal vez tomé demasiado pronto tu mano, o tal vez fue el beso que me robaste que marcó mi corazón.

No quisiera dar explicaciónes, porque sé que nos las entenderás como aquella noche al rededor de las 10 pm, nunca olvidaré cómo me trataste, y nunca olvidaré como me rebaje tanto, que estupidez!, gracias por recordarme que debo respetarme, me cegué tanto por lo que sentía, por lo que sigo sintiendo...

Aún con el dolor de mi corazón, sé que lo hecho hecho está, pero si pudiera pedirte algo es que no te cierres al amor, eres un chico increíble, inteligente, eres muy guapo y tienes un carácter sorprendente, lamento que en muchas ocasiones no lo sentiste así, mis miedos me ganaron, pero bueno, ya es tarde para arrepentimientos.

Sé que encontrarás a alguien, que te dará tanto o más de lo que tu a ella, que valore cada detalle, que sea lo suficientemente madura, que comparta tus gustos y aficiones, que se sentirá invencible cuando tome tu mano, y que te dará lo que tanto anhelas, será perfecta con todas sus imperfecciones, estoy segura que llegará a tu vida, porque te lo mereces, porque lo vales, no te cierres a eso, serás muy feliz, con sus altibajos y todo, pero vivirás plenamente.

Sé que la desconfianza es la enfermedad más terrible de una relación, pero el tiempo se hará cargo de curar nuestras heridas, cicatrizaran, y de aquí a unos años mirarás hacia atrás y entenderemos que todo lo que vivimos a lo mejor tuvo que ser así, todo tiene un motivo, un por qué, una finalidad, y en nuestro caso es algo que descubriremos en un futuro tal vez no muy lejano.

Te quiero mucho y siempre lo haré Sebas, jamás creí decir o escribir estas cosas, siempre me parecieron cursis y absurdas, pero llegaste tú y le diste vuelta a mi mundo, jamás escribí de corazón, pero eso tú me lo enseñaste, eres y serás el más grande amor que tendré, estos 3 años y más fueron los más maravillosos de toda mi vida, me marcarán para siempre y quedarán en mi memoria hasta el fin de mis días...

¿Quién iba a pensar que conocería al amor de mi vida en una biblioteca? jamás lo imaginé, no lo planeé, no lo esperé, y es que así es como suceden las cosas más bonitas, espontáneas...

Y así como tú alguna vez me escribiste, yo puedo decir que a mis 21 años me sentí las mujer más dichosa por haber podido conocerte y compartir contigo, las travesuras, risas, enojos, todo, absolutamente todo fue perfecto, fue mágico

Sé que nunca podré decirte todo esto, y por eso lo escribo aquí...

Hasta siempre Sebastián